Guardián tecnológico cuida la vida de las personas en carreteras
¿Confiamos cien por ciento en la habilidad humana? No siempre. Sabemos que nos equivocamos. ¿Confiamos cien por ciento en la tecnología? No siempre. Sabemos que fallan.
¿Confiamos más en la combinación de fuerzas entre humanos y la tecnología?
Tal vez sí, porque los límites que tiene el hombre los complementa la máquina. Y porque el criterio humano, a pesar del desarrollo de la inteligencia artificial, aún no lo tiene la máquina.
La generación de confianza en un sistema manejado por humanos y con apoyo de alta tecnología ha permitido ajustar mejor nuestras condiciones de vida frente a las exigencias laborales como también del descanso.
El caso particular del trabajo de los conductores del transporte terrestre de buses y camiones, en distintas áreas de servicios, se ha visto beneficiado por esta combinación con el uso de un guardián tecnológico.
Un guardián vial en carreteras, la forma de viajar confiados
Te subes a un bus y te reclinas tranquilo en tu asiento y te duermes para que otra persona te conduzca a dónde vas: confías. Envías un paquete o un documento a otra ciudad por una empresa de transporte: confías.
No confiamos por un simple acto de fe, sino porque se nos ha demostrado con evidencias una serie de medidas correctas en las que podemos confiar.
Confiamos en buenos y responsables conductores, en la aplicación de protocolos de seguridad en un amplio sentido, lo que significa una gran escala de confianza.
Los conductores también necesitan confiar en sus capacidades y los procesos que los respaldan. Los empresarios del transporte también necesitan confiar en sus conductores y el cumplimiento de protocolos.
Pero la confianza en el rigor humano puede ser sustentado a su vez, por las tecnologías. Es en toda esta escala de confianza humana donde el desarrollo tecnológico hace nuevos aportes.
El avance tecnológico al servicio del hombre en las carreteras
En el caso de los conductores de empresas de transporte terrestre la tecnología inteligente está brindando excelentes resultados.
Una empresa australiana desarrolló un sistema de hardware y software basado en algoritmos que detectan tres de los mayores peligros que sufren los conductores profesionales: la fatiga, la somnolencia y la distracción.
Este sensor ubicado en la cabina del conductor hace una lectura de la expresión del rostro y corporal de los conductores para detectar estas señales frente al volante.
La respuesta del sistema es un sonido de alarma y vibración del asiento del piloto para devolverlo en instantes a la atención en su trabajo. Esta ayuda es fundamental porque le resta un tema de tensión y preocupación al conductor para evitar accidentes, y así pueda disfrutar más su trabajo y mejore su concentración en la generalidad de sus acciones
Y un sistema y una organización de respaldo
Además, como respaldo a esta tecnología que ya se encuentra en Chile y en otras partes de Latinoamérica, el sistema “envía los eventos en tiempo real a través de comunicación 3G al centro de control GUARDIAN que se encuentra en Tucson-Arizona-USA. Ahí hay un equipo de personas monitoreando cada una de las flotas (…) las 24 horas del día los 7 días de la semana los 365 días del año.”
De acuerdo con Jorge Morales de la compañía Seeing Machine en Chile, las empresas de transporte que adoptan el sistema, solo deben “encargarse de tener personal definido, ya sea a través de algún centro de control que ellos tengan para administrar su flota o a través de algunas personas encargadas, para que reciban los llamados y alertas de nuestros centro de monitoreo”.
El respaldo en el trabajo también significa calidad de vida
Las empresas que instalaron este sistema ven los resultados concretos no solo en el momento en que un conductor se repone del riesgo de un inminente accidente. Hay bases de datos que demuestran su eficacia.
En Latinoamérica se han instalado 2.345 unidades, se han registrado 431.057. 251 millones de kilómetros recorridos, con ello se han detectado 17.019 casos de fatigas en conductores y 718.332 estados de distracción.
¿Cuántas vidas se han podido salvar con estas cifras?
Igualmente, este apoyo tecnológico brinda calidad de vida a los conductores porque resguarda en la cotidianidad del trabajo, evitándoles accidentes y la preocupación de caer en algunos de estos estados de riesgo.
Jorge Morales explica que han “logrado reducir los niveles de eventos de somnolencia y distracción en hasta un 94%. Los conductores están cada vez más familiarizados y consideran el sistema como una tecnología de seguridad que les puede salvar la vida.”
Por eso, también se convierte en un beneficio que cuida al conductor en su oficio al considerar que este sistema “son de mucha ayuda en sí (…) y reacciona bien”, tal como lo afirma Alejandro Villarroel, conductor hace 17 años.
Este sistema permite realizar las actividades de forma más relajada para los conductores, para las empresas de transporte y para los usuarios de las mismas. Esta tecnología produce un efecto esencial a nivel humano y en la calidad de vida, que se resume en este valor que hemos mencionado: la confianza.